La niña de ninguna parte

“No me estás entendiendo —dijo—. Esta niñita desapareció el 3 de abril de 1990. Lleva desaparecida veintiocho años. No creo que secuestraras a Sammy Went. Creo que eres Sammy Went” ~ La niña de ninguna parte de Christian White.

Una joven fotógrafa residente en Australia, Kim, recibe la visita de un joven que le comunica que ella es Sammy, una niña robada en Kentucky, Estados Unidos, cuando tenía dos años. Kim no da crédito a lo que escucha pero poco a poco comienza a atar cabos y no descarta la versión que le ofrece el joven contable con lo cual decide viajar a Estados Unidos para averiguar la realidad.

Este libro es un no parar. Además es que es de esos que se leen tan fácilmente que cuando te das cuenta ya te has bajado medio libro sin querer. Los capítulos van intercalando el pasado y el presente y así conocemos cómo van las averiguaciones de Kim y al mismo tiempo qué pasó la noche cuando desapareció la pequeña Sammy en aquella localidad marcada por el fanatismo religioso.

Me gusta como escribe este autor. Su último libro “La esposa y la viuda” me encantó. Este es un libro disfrutón y está muy bien pero me ha chirriado un poco el comportamiento de un personaje que no me he creído pero claro, sin ese comportamiento extraño no habría historia. Otra de las cosas que no me han gustado nada, pero esto ya es por fobia personal, es que hay demasiadas serpientes en esta historia con lo cual esas páginas las he leído en diagonal, ¿para qué os voy a mentir? Vamos, que no estaría de más que en ocasiones se incluyeran en los libros etiquetas como las de alimentación “contiene trazas de serpientes”, por ejemplo.