Empezamos por el final

Esta es una de esas novelas que nunca me hubiera llamado la atención, una de esas que no crees que te vayan a encantar, pero iba con las expectativas muy altas y las ha cumplido.
Como es costumbre, empiezo diciendo que no es un thriller como tal, es verdad que la novela comienza fuerte, con un asesinato ocurrido 30 años antes de lo que luego es la novela, y ese asesinato va a ser el hilo conductor de esta historia, de esta historia de personajes.
"Mejor y peor, malo y bueno. Ninguno de nosotros somos una sola cosa. Somos solo una colección de las mejores y peores cosas que hemos hecho"
Si algo hay que destacar por encima de todo, es la gran caracterización de los personajes tanto principales como secundarios, todos ellos son importantes en la historia, todos tienen sus secretos y sus historias y todos tienen mucha importancia en la trama principal.
Según vas leyendo el libro, sientes que los personajes son reales, que se comportan como probablemente nos comportaríamos todos, con sus sentimientos, sus emociones, sus motivaciones...
La pluma del autor es sencilla, directa, con ritmo, aunque no es un ritmo frenético, vas poco a poco asimilando la trama, pero sin darte tregua en ningún momento.
"La tragedia tiene una manera de convertir a los pecadores en santos"
Una historia dura, narrada con naturalidad, una historia que ocurre a partir de un error y todas las consecuencias que puede traer este,
Y con un final, que me ha gustado, no habia opción a otro. triste, pero a la vez bonito...
"Aprendemos cuando somos mayores, empezamos por el final"