Es una historia increíble que combina el suspense de un thriller con la riqueza del mundo del arte. al principio, estaba un poco confundida por la cantidad de nombres y datos, pero una vez que vamos avanzando en la historia de Inés Güell, una joven historiadora del arte cuya vida da un giro inesperado al heredar un enigmático cuadro pintado por su abuelo, todo va cobrando sentido. Este cuadro se convierte en el eje central de un misterio que se remonta a siglos atrás y está vinculado a famosas obras de arte, incluyendo la icónica "El jardín de las delicias" de El Bosco. La trama se desarrolla con una mezcla de intriga y descubrimientos artísticos, muy estilo Dan Brown. Cada giro y revelación me mantenía enganchada a la historia. El autor vuelca en esta historia su amor por el arte, logrando despertar mi interés un poco más por el arte, incluso siendo un poco ignorante en el tema del arte. Inés, como protagonista, se ve envuelta en una trama llena de peligros y revelaciones, mientras se enfrenta a un camino lleno de desafíos en su búsqueda por descubrir los secretos ocultos. A lo largo de su viaje, encuentra aliados como el profesor Grant, pero también se enfrenta a adversarios decididos a detenerla en su camino hacia la verdad. La novela no solo ofrece una trama increíble, sino también una reflexión profunda sobre el arte, la percepción y los mensajes ocultos en las obras. Me ha sorprendido la cantidad de investigación y documentación que hay detrás de la historia.Es una lectura que combina misterio, arte y filosofía. + Leer más |