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Las estrellas es un concentrado de como se pierde a una madre, de como una enfermedad lo destroza todo, incluso de como la esperanza está ahí hasta el último aliento. Es una lectura humana, certera y dolorosa. Leer sobre el duelo es sanar un poco la herida. El duelo puede ser el momento más introspectivo que podamos vivir. Es una despedida a una madre, a quién te dio la vida, así que también podríamos decir que es una especie de carta de amor hacía ella. Es también reconciliación y sanar un poco esos vínculos que a veces se ven afectados en algunas relaciones maternofiliales. Pero sobre todo es la ante sala a una pérdida, a una ausencia eterna, a que se apaguen palabras cómo “mamá, madre...” de la garganta. Nadie nos enseña ni nos prepara para algo así y resulta ser un momento dónde más vulnerables nos encontramos. Cabe decir que por supuesto cada persona es un mundo y experimenta el duelo a su manera. Cómo último aprendizaje: el tiempo es oro. Aprovéchalo. Vuelve a ese sitio de la infancia, mira fotos antiguas con tus padres, que tus abuelas o abuelas te cuenten sus historias, comparte más tiempo con hermanas y hermanos y, sobre todo, nunca dejes que el tiempo vuele cuándo vivas esas escenas. |
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