Es el diario de una chica de veinte años, una chica que escribe sin filtros lo que le ha supuesto caer de bruces en el mundo adulto. Me quedo con esta reflexión: "...en mi cabeza suenan versos entonados por la niña que ya no soy, que se me está muriendo dentro, intoxicada por el contacto con el mundo que tantas ganas tenía de conocer". A lo largo de su lectura me ha producido muchas sensaciones distintas, desde la ternura a la pura fatiguita. Lo que no se puede decir es que deje indiferente. |