Etna Velarde. Rostros, historia y autoestima nacional

Las acuarelas de Etna recorren la selva, la sierra, la punta, la costa, los pueblos, los ríos, los Lagos y los pueblos, y dan vida a figuras que más allá de los detalles indican una técnica magistral y tienen inserto un mensaje de identificación de lo que es un Perú totalmente nuestro, con todos los mestizajes, dentro de los paisajes naturales y sociales difíciles de no percibir cuando se recorre el país

El problema es descubrir el medio más adecuado para expresar el sentimiento y razonarlo, ya sea a través de la poesía, música, pintura, buscando con pasión y estricta disciplina la expresión auténtica de su esencia. Esa búsqueda nunca termina y cada vez hay menos tiempo, mientras los horizontes se amplían y la Belleza es tan grande como el Universo

Me gusta la luz reflejada en el lago Titicaca, San Blas del Cusco, Yanahuara y Cayma en Arequipa. Me gustan los ojos dulces de las llamas, vicuñas y alpacas y las flores rojas de los actos de las alturas de los Andes

El arte no solo es el resultado de la pura y simple inspiración, sino que el deseo de expresar lo que se siente conlleva la búsqueda del conocimiento de los recursos técnicos necesarios para su mejor expresión

Se requiere una serie de imaginarios que den coherencia a la autoestima de la nación. Eso nos lo ha dado Etna Velarde en sus cuadros y en su poesía

Delineando en ángulos
la eternidad de los siglos
peñascos de grandes artistas
entintados en grises, verdosos, pardos
cortan el espacio azul
pintas naranjas se deslizan
y acuarelan superficies de granito

Gracias a la pinturas de Etna Velarde, los peruanos conocemos a nuestros principales próceres, héroes y mártires de la formación nacional, así como a multitud de personas que han aportado al enriquecimiento de la nación

Ellos han Sido no solo trasladados con la maestría del dibujo, sino incluso recreados en sus fisonomías. Logra Etna descubrir en el personaje aquellos aspectos que lo singularizan y lo expresan de su mejor manera

Pinté muchos héroes que lucharon por nuestra patria, pinté también las escenas de momentos culminantes de su inmolación y deseo que los espectadores, y especialmente los jóvenes, cobren conciencia, al contemplar el dramatismo y expresividad turbulenta de sus luchas, de que esos hechos no deben repetirse; y también cobren conciencia de que los héroes murieron por un ideal de la patria, y crear así mística sobre el heroísmo que significa dar la vida por la patria