Es un libro para leer sabiendo que vas a subrayar, vas a poner señalizadores y vas a anotar impresiones, que leerás parándote a buscar entre tus otros libros o entrando en Internet para solucionar, comprobar o refrescar tu memoria.... Es un libro que te lleva, te conduce a otras lecturas y a otros momentos. Si te gustan los libros y su historia, si te gusta leer y conocer cómo ese objeto rectangular -la más de las veces- es tan indispensable para algunas personas -puede que tú entre ellas-, es un libro que te llenará. al menos es una lectura que te reconforta. Irene Vallejo escribe como habla, o viceversa, con pasión por los libros, tanto como objetos en sí como contenedores de un saber antiguo que aún resuena en nuestros días. No negaremos que es una lectura exigente, a veces se repite -como un maestro que nos recuerda la lección para seguir avanzando-, pero es una lectura muy amena y divulgativa, una lectura que denota que en su escritura se puso mucho amor por ese objeto "casi perfecto" que es un libro.
|