El hijo del Traidor. El sendero del guardabosques

Seguro que muchos de vosotr@s habéis verbalizado como un mantra aquello de: "¡ay si yo volviera a los 15 años con lo que sé ahora! Suspiro incluido.

Los caminos del señor son inescrutables y aquí se dieron dos causalidades.

1. El libro estaba en la extensa lista de deseados de mi hija pequeña.

2. Babelio, Masa Crítica, Harpercollins y Pedro Urvi, hicieron el resto. La novela me fue asignada, y a todos ellos les quedo muy agradecido.
Pero la magia es del autor.

Este cuarentón al que no le faltan muchos números para cambiar el adjetivo había abandonado por completo el mundo de la fantasía épica.
Urvi me ha hecho regresar a mi adolescencia con lo que ahora sé.

Y, ¿sabéis qué? ¡Ha sido increíble!

El hijo del traidor es la primera entrega de la saga El sendero del guardabosques. Lasgol vive en una pequeña aldea bajo el estigma heredado por la traición que su padre cometió contra el rey Uthar.

Odiado, vejado y apaleado por todos, nuestro protagonista recibe la inesperada visita de un reclutador que le ofrece la posibilidad de unirse a la escuela de guardabosques, pero le advierte que el curso será duro, y que allí, será más ultrajado si cabe al haber sido su progenitor miembro destacado la escolta real.

Lejos de ser una obra inciática donde se presentan a los personajes y poco más, el texto presenta una aventura completa que coincide con el primer curso de esta particular escuela.

La estructura es sencilla, pero muy entretenida, ya que en cada estación se realizan unas pruebas donde su dificultad va en aumento.

Urvi maneja un lenguaje práctico. Apropiado para cualquier edad. Ni infantilizado, ni complejo, y esto que parece una nimiedad, es verdaderamente difícil de alcanzar. Me quito el sombrero.

No me lo vuelvo a poner. La trama engancha, tanto que leer sus páginas se convierte en pura necesidad.

Por si fuera poco la ambientación es impecable. Dibuja un mundo muy fiel(y de esto sé) a las costumbres medievales, mezclado con ligeros toques de magia y fantasía que van creciendo al mismo ritmo que todo lo demás.
En resumen:
Un libro que ha despertado apetitos perdidos y que os invito a degustar.
¿Te lo vas a perder?