A veces no sentimos atracción física hacia alguien, sino sentimental. Te enamorás de su alma, y dicen que eso es jodidamente irreparable.
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A veces no sentimos atracción física hacia alguien, sino sentimental. Te enamorás de su alma, y dicen que eso es jodidamente irreparable.
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Lo miró. Sebastián hizo lo mismo. Y sus ojos colisionaron como dos estrellas supernova, chocando y rompiéndose. Ambos entendieron todo. Ambos sabian que eso era todo. Ellos lo eran todo. |
El matrimonio es un amor que florece entre dos personas y la promesa de que lo que existe entre ellas, solo puede convertirse en algo aún mejor día a día. Es un vinculo entre dos personas que se quieren tanto que sus corazones estallan de alegría, amor y compasión hacia el otro y nadie puede decirles que no pueden ser el uno para el otro o que no deberían amarse.
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El miedo a no ser suficientemente bueno para alguien se llama “atelofobia”.
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Lo que callamos y nos pesa, tarde o temprano se nos sale por los ojos.
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Tengo ganas de vos hasta cuando no tengo ganas de nada.
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Su interior es más brillante que el mismísimo sol.
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No todos los días tenemos la suerte de encontrar a nuestra otra mitad.
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-Mirá viejo, si vos sos feliz, yo también lo soy -comenzó diciendo el muchachito de melena amarilla-. Y si tu felicidad es al lado de un hombre o una mujer, para mí es lo mismo. Vos sos un gran hombre y un gran padre ante todo, y yo siempre te voy a amar porque sos mi papá, el que siempre me cuida y me da buenos consejos, el que no me juzga y se preocupa de que nada me falte.
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Me cuesta a veces estar cerca tuyo, pero eso no quiere decir que no sienta deseos de estar junto a vos.
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Una oda de Friedrich Schiller se escucha al final de su última sinfonía cantada por un coro.