No destruyas al Devorador:

La cuarta entrega de la serie de los Devoradores de Pecados de Lighling Tucker es un poco diferente ya que el comienzo de la novela muestra el lado autodestructivo de Aimee, tras dejar el cuartel de los Devoradores, pero a medida que iba leyendo me fue enganchando como los libros anteriores al dejar la trama de ser tan dura.
La verdad es que me lo pasé en grande cuando los demás personajes entraron en escena ya que si por algo se caracterizan estas novelas, además de por unas fabulosas escenas de acción y lucha, es por ser corales y porque conocer a los nuevos miembros de la saga es un pasote! Sin destripar demasiado, os diré que tenía ganas de ver a Aurah (la hermana del alfa de los lobos) y en este libro aparece bastante, aunque os recomiendo que no perdáis de vista a una pareja de gemelos, a una niña de lo más especial y a una humana llamada Winter.
Entre los aspectos que más me han atrapado están los enfrentamientos con los esbirros del malvado Seth, el sentido del humor y desparpajo de determinados personajes y los giros de la trama porque hay más de una sorpresa entre las páginas de No destruyas al Devorador.
Lo que me menos me ha gustado ha sido el principio ya que Aimee llega a un extremo que… buf, por lo que me costó meterme más en la historia que en otras ocasiones. Aunque seguí leyendo, por supuesto, y el resultado final es espectacular.