Fred Neville, un joven y atractivo oficial inglés de caballería, se convierte en heredero de un título nobiliario, pero pide poder pasar un año con su regimiento en Irlanda y “vivir aventuras” antes de asumir sus obligaciones. En Irlanda conoce a Kate, joven de escasos recursos y pasado familiar desconocido, y se enamoran en medio de promesas de él de matrimonio y eternidad. La familia inglesa de Neville, no está dispuesta a que una irlandesa católica, sin pasado, sea la nueva condesa de Scroope, y así, mediante presiones familiares y responsabilidades asociadas al nuevo título de Fred, este empieza a tener mellas sobre sus promesas a Kate, y empieza a contradecir las mismas, prometiendo lo contrario a su familia. El personaje central y el que mejor desarrollo tiene es el nuevo conde, Fred, un joven idealista e inmaduro, que para no hacer frente a ciertas situaciones o por no saber confrontar estas situaciones, se ve inmerso en una serie de promesas contrarias entre los dos bandos sobre los cuales se encuentra, al respecto de tomar como esposa a una joven humilde y de dudoso proceder, como es Kate. Vemos como Fred, por más buenas intensiones, sueños y proceder que muestra al inicio, va mostrando su inmadurez a través de actos y palabras que terminan comprometiendo la inocencia de una joven humilde y por lo tanto, dando nacimiento a un escándalo que mancharia su nuevo título. Como personaje, Fred, termina siendo alguien que excuda su cobardía e inmadurez, reflejando en otros los defectos que el mismo representaba con sus promesas irreales. Va cambiando su visión de lo que le rodea y de la situación en la que el mismo se involucra y es responsable, haciendose a si mismo víctima, cuando en realidad era el victimario. Y es por este tipo de comportamiento y por su incapacidad de enfrentar los hechos y cumplir con sus promesas, que finalmente sucumbe ante un poder mayor; el dolor, la desespereacion y la venganza de quien espera ver cumplidas esas promesas. Creo que en esta historia, Trollope hace una Crítica social de una sociedad donde el engaño y la traición están permitidos o son perdonados y cubiertos para el hombre y más si este tiene cierta posición, y que si finalmente quien sufre por ello es una mujer, sin rango, dinero, status o clara procedencia, es el deber ser y con resultado de los actos de una joven inocente que cometió el error de enamorarse y confiar. El honor es un arma de doble filo, y solo importa para salvaguardar un título y status social, no para cumplir promesas hacia alguien que no forma parte de la alta sociedad. Es mi primera novela del autor, y la novela esta muy bien, se lee fácil, esta muy bien desarrollada la trama principal, aunque algunos monólogos del protagonista, pueden resultar repetitivos y monótonos. Es un final muy diferente para lo que he leído de novelas victorianas, y es una de las cosas que más me gustaron de esta corta novela, aunque, a mi modo de ver, faltó mejor desarrollo de los personajes femeninos. |