Una vez más Jerónimo Tristante ha hecho un libro precioso. Está historia ambientada en la construcción del Valle de los caídos, con un crimen por resolver allí mismo , un crimen que a nadie parece importar, nos cuenta una amistad que, de entrada, parece imposible, un militar del bando ganador y un preso republicano. Durante todo el libro, uno y otro, con sus recuerdos, van mostrando la crudeza de la guerra en los dos bandos, el horror que todos vivieron, aunque esa amistad es una esperanza. El libro lo dividiría en tres partes: la primera se me hizo un poco lenta, parecía que no iba a ocurrir nada. La segunda, la que más me gustó, donde conocemos la historia y circunstancias de los dos protagonistas y la tercera, con su inesperado final, que te deja muy buenas sensaciones a pesar de todo. Un libro muy bonito de los que luego estás días recordando. Muy recomendable. |