Tierra profana es de esos libros que te atrapan, pero no sabes ni porqué. Lo que comienza siendo una ucronía muy interesante sobre una Palestina judía en mitad de África, termina por ser algo mucho más inquietante. Pero creo que es mejor que no cuente nada, creo que es mejor descubrirlo poco a poco. Sí diré que me ha resultado algo complicado de seguir, con los cambios de personajes y los giros de la historia (que son bastantes). Y el final también me ha parecido algo precipitado, pero no por ello pierde valor. Recomiendo mucho el posfacio de Nieves Mories, muy clarificador y que ayuda a la comprensión del libro.
|