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Esta novela me ha enganchado de principio a fin. La he devorado en un día. Ha sido como una droga… No he podido hacer otra cosa que no fuera leer este libro hasta que no quedaran más páginas por leer. El libro nos narra la historia de Lucy, quien tiene un trabajo que le gusta mucho en una editorial, pero no todo podía ser perfecto, puesto que tiene que trabajar junto a Joshua, un compañero de trabajo un tanto antipático. Su enemistad genera una tensión palpable en el ambiente. Lo cual amenizará también los días de Lucy en la monotonía de la oficina. Ambos trabajan para los co – directivos, cada uno dedicado a uno. Por ello, existe cierta competencia entre ambos. Pero no todo sería tan malo si Joshua no fuera tan cerrado y gruñón. Entre ambos desarrollan una serie de juegos para chincharse. Está el juego de “tendré que llamar a Recursos Humanos”, el de “las miraditas”, entre otros, todo ello acompañado de una gran cantidad de comentarios sarcásticos. Por supuesto, Joshua no iba a ser un protagonista masculino del montón. No, no, entonces no sería una historia romántica como tal. Por supuesto que nuestro protagonista está tremendamente buenísimo. Y esto es algo que me empieza a rechinar en estas historias. La importancia que se le aporta al físico. He leído unos 8 libros románticos este mes (os recomiendo echarle un ojo a mi Goodreads) y este sin duda me ha encantado, pero después de leer 8 historias con protagonistas del otro sexo que pueden rivalizar con Adonis en belleza, me siento un poco hastiada ya. Pero bueno, la historia es muy cómica. Lucy tiene muy poco filtro a la hora de hablar y siempre intenta picar a Joshua, quien la pica de vuelta. Y este juego que se llevan entre manos puede ser muy, pero que muy peligroso… Sin duda recomiendo este libro. Yo ya os aviso que no descarto releerlo pronto 😛 Enlace: https://laspalabrasdeesperan.. |
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