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El libro comienza presentándonos a Julie, una adolescente que acaba de mudarse de la gran Seattle al pequeño pueblo de Ellensburg, donde conocerá a Sam, se enamorarán y empezarán una relación. Y 3 años después, Sam morirá en un accidente de tráfico. A partir de ese momento acompañamos a Julie a lo largo de todo su proceso de duelo, atravesando con ella las distintas fases. La historia, narrada por Julie en primera persona, mezcla capítulos del presente con otros formados por recuerdos hermosos de su relación con Sam, que se suceden enlazados, saltando repentinamente de uno a otro. Es una historia muy bonita y tierna que te hace comprender la importancia del ahora, de vivir el presente, ya que si dejamos algo para después con alguna excusa es posible que ese "otro día" nunca llegue. Aunque no soy muy fan de este tipo de literatura, tengo que reconocer que me ha tenido el corazón encogido y las lágrimas asomando casi de principio a fin. |
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