Sinsonte

"Nada en mi educación - mi estúpida educación que me había llevado a odiar la vida - me había programado para lo que estaba a punto de suceder."
Y lo que estaba a punto de sucederle a Bentley (uno de los tres protagonista de esta novela) era, ni más ni menos que la vida misma pues, hasta esos momentos, entre drogas (sopores) y sexo rápido, vivir lo que se dice vivir...
Sin embargo, ya ha descubierto que puede leer, también que se puede enamorar, tan sólo le queda sufrir decepciones, dolor, empatía por otro ser humano, amor por otro animal, añorar a un amigo, sentir frío, hambre, pena... ¿Pero este hombre dónde ha vivido todo el tiempo?
Pues en una Tierra postapocalíptica donde los robots son mayoría frente a una humanidad que poco a poco desaparece. Este es el caso de la ciudad de Nueva York donde Spofforth, un Máquina Nueve, contempla la posibilidad de lanzarse al vacío para acabar con una vida eterna que ya no desea. Así comienza esta novela que su autor, Walter Tevis, escribió en los años setenta del pasado siglo XX porque veía que sus alumnos de literatura tenían un nivel muy bajo (hoy le daría un pasmo)
Terrorífica y apasionante a un tiempo esta historia que, escrita en el pasado siglo, está de plena actualidad. ¿Puede la IA hacerse con el control del planeta? Según Tevis si. Tan sencillo como implantar un cerebro humano en un robot de ultimísima generación. ¿Es factible? El tiempo lo dirá, pero la perspectiva de que pudiera serlo es aterradora. La novela lo es, aterradora, apasionante, muy entretenida, con descripciones que hacen del autor un vidente extraordinario.
"¿Qué ha sido de las conversaciones? - pregunté- ¿Por qué la gente ya no habla, Bob? Pero, ¿qué pasó?, ¿por qué la conversación, la escritura y la lectura... ¿por qué murieron?"
"Los robots habían sido un regalo para el mundo bajo la mentira de que nos librarían del trabajo pesado para que pudiéramos crecer y realizarnos interiormente."
El tercer personaje, la mujer de la que se enamora Bentley, es Mary Lou. Vive en el zoo y se alimenta de los sandwiches que los robots tontos se olvidan guardar en las máquinas expendedoras. Es otra antisistema que odia a los robots y se niega a vivir en una sociedad que la mantiene aletargada todo el tiempo. Será ella la que le anima a Bentley a dejar de tomar las drogas que les mantienen idiotizados sin poder "vivir" en condiciones.
Spofforth, Bentley y Mary Lou, tres "almas" que el destino unirá para ayudarse mutuamente en un objetivo común: conseguir la libertad.