 |
Linaje ancestral me ha dado dos cosas, así que escribiré una reseña teniendo en cuenta dos puntos de vista. Lo que más me gustó es que Adrian Tchaikovsky trabaja un dúo de perspectivas muy bien diferenciadas, no solo en cuanto a personajes (Lynesse y el Ancestro Nyrgoth), sino que también acierta a la hora de elegir qué tipo de narrador, ambientación, ritmo, tiempos verbales y vocabulario usar para cada parte de la historia. ¿Fantasía vs. Ciencia ficción o Fantasía + Ciencia ficción? Esta novela corta plantea una buena pregunta y puede entenderse desde el ángulo que cada lector prefiera. El inicio me pareció fascinante, ya que pocas veces he leído historias en que exista una dualidad tan marcada y, aunque no me pareció original (¿qué es original en 2023?), sí me enganchó lo suficiente como para adentrarme en la lectura. Magia frente tecnología, creencias y supersticiones frente a estudio y ciencia, ingenuidad frente a experiencia y cohibición de los sentimientos. ¿Pueden convivir en el mismo mundo y caminar de la mano? Otro aspecto que me agradó fue que, a través de Lyn y Nyr, y de sus viajes de autoconocimiento en caso de la primera y de liberación para el segundo, se plantean dos visiones de la misma realidad que dependen del entorno en el que se ha crecido y se vive, y de la gente que te rodea (y de ti mismo, por supuesto). Mi problema con Linaje ancestral es que creo que los personajes no están lo bastante desarrollados (y no es excusa que tenga solo 160 páginas). No he encontrado en Lynesse apenas nada que me atrajera, a pesar de ser co-protagonista. Por suerte en Esha y Nyrgoth encontré algo más, por breve que fuera. A veces hay personajes secundarios que están mejor y más desarrollados que los principales. Solo hacen falta pequeñas pinceladas; poco puede ser mucho. Conforme avanzaba, y sobre todo una vez superada la mitad de historia, mi entusiasmo inicial se fue desinflando, tal vez porque la trama empezaba a ser demasiado previsible y la relación entre Lynesse y Nyrgoth me parecía cada vez más forzada y repetitiva. de cara al final, cuando los sentimientos de Nyr se aclaran un poco, volví a conectar un poco con los personajes, pero el final estaba cerca y fue más bien áspero y deshilachado. Aun así, y teniendo en cuenta muchos factores (como siempre hago a la hora de evaluar si un libro me ha gustado), considero que Linaje ancestral fue una lectura interesante y amena, pero que ni mucho menos añadiré a mi lista de historias que me hayan encantado. |
>
