Esta historia está narrada por el "fantasma" de Ellie una adolescente de quince años que fue violada y asesinada por su novio y el hermano de éste. Mientras la policía la está buscando, su fantasma nos va contando cómo sigue siendo testigo de los abusos que siguen perpetuando estos chicos y los hechos previos a su asesinato. Es una historia que te deja destrozado, que no es agradable de leer, que te hace llorar más de la cuenta, pero alguien tenía que escribirlo. Siento que es un libro muy necesario y, pese a su crudeza y el horror de lo que cuenta, me parece muy bien que esté destinado a un público juvenil, para que puedan ir leyendo sobre temas jodidos, fuera de las distopías y los romances, y entender que la parte fea también forma parte de un todo, y éste tipo de libros son necesarios. |