Thriller nórdico puro. Con este libro me ha pasado lo que más me gusta y es que me cueste parar de leer. He estado enganchadísima estos días. La trama enrevesada y el ritmo endiablado de acontecimientos es lo que más he disfrutado. Quizás el personaje más flojo es el de la inspectora Naia Thulin, demasiado hermético... casi no sabemos nada de ella aparte de su labor policial. La parte final del libro es tensión pura. Un 4,5. Muy bueno. |