El amor es un juego peligroso. Y la protagonista de esta historia, Tina, lo sabe muy bien. Ella nunca se ha enamorado. Nunca ha sentido lo que significa que alguien te quiera con todo su ser. Pero cuando conoce a Jason Graves, el hombre de sus sueños, y comienza a trabajar con él, entiende que en el amor no hay reglas escritas y que hay que jugar las cartas que te han tocado. Una oportunidad de trabajo, una atracción irresistible y una pasión desenfrenada son el punto de partida de esta historia tan adictiva. Tina desea un cuento de hadas y Jason es el hombre ideal para ella. Un actor guapo, divertido, sincero y agradable. Trabajar codo con codo con él no será fácil en un principio pues la vuelve loca. Sin embargo, ambos darán rienda suelta a su atracción y vivirán la aventura de sus vidas. ¿Qué pasará cuando el trabajo de Jason acabe? ¿Qué pasará con ellos? ¿Por qué Tina siente que nunca debería haberse dejado llevar? Decisiones, corazones que se rompen, viajes que no se pueden evitar, sorpresas que se interponen en su camino y un sinfín de situaciones harán que los cimientos de su relación se tambaleen. Una trama llena de romance, de familia y de mucha amistad, pero de un amor tan intenso que puede lograr derretir el hielo de cualquier corazón. Dos protagonistas que me han encantado, porque son reales, con sus dudas, sus miedos y su inseguridad. Una historia que me ha conmovido y que ha sido una auténtica montaña rusa de sentimientos. La recomiendo sin dudarlo. |