Este libro me llamó la atención por la portada, el título, pero principalmente por su autor y decidí que había que leer algo suyo tan lejano de su obra más conocida y famosa. Este es un libro ideal para cualquier niño pequeño, más si está aprendiendo las operaciones matemáticas básicas. Stoker crea una historia tierna y sencilla en que el número siete reclama lo que considera injusticias dentro del mundo de los números. No es el Stoker de Drácula, pero si es la obra de alguien que sabía cómo encantar con un relato Cmo es habitual en la editorial Gadir, las ilustraciones son de primera calidad. |