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Cuando Skeeter regresa a Jackson después de graduarse en la universidad, comienza a ser consciente de ciertas actitudes de discriminación y segregación racial que no puede ignorar, así que decide dar voz a las personas más discriminadas de la ciudad: las mujeres negras que sirven en casa de familias blancas acomodadas. A partir de las entrevistas que irá realizando, y de la voz narrativa de dos de las criadas de Jackson (Minny y Aibileen) iremos conociendo como es la vida de la comunidad negra en Missipi. E l libro, está ambientado en los años sesenta cuando las leyes de segregación aún siguen en vigor, por lo que sabemos que nos vamos a encontrar unas historias de vida muy duras sobre esa discriminación y deshumanización que sufren las personas negras. Sin embargo, también toca otros muchos temas como el papel de la mujer de clase media, cuyo único objetivo es buscar a un buen marido, tener hijos y dar una buena imagen en sociedad; la distinción bien marcada entre clases sociales, algo que vemos con el personaje de miss Celia quién tiene unos orígenes humildes; la violencia de género; y la homofobia puesto que la homosexualidad es tratada como una enfermedad o algo que se puede corregir con la violencia. También iremos viendo cómo se desarrollan momentos históricos muy importantes de los Estados Unidos como el activismo por los derechos civiles, la marcha Washington de Martin Luther King, el movimiento “Panteras Negras” y de su opuesto el “Ku klux klan”, y el asesinato de Kennedy. Por todo esto, Criadas y señoras, es un libro que me ha gustado mucho pero también he encontrado algunas cosas que no me han terminado de convencer, como el personaje de Skeeter ya que en ciertos momentos la autora describe ciertas acciones y pensamientos del personaje muy contradictorios, o datos de algunos personajes que se confundían un poco. Dicho esto, recomiendo tanto el libro como la película porque creo que son situaciones que se deben de conocer y reflexionar sobre ello. |
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