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Lo bueno de todo esto es que la autora logró que un tema tan cotidiano hoy en día te haga sentir atraído enseguida, como se van dando las cosas y enlazando todo. Y por supuesto, el final es lo mejor del libro. En el final es difícil contener las lágrimas, es un libro de lectura ligera y que me mantuvo enganchada desde el principio, da mensajes importantes, trata situaciones familiares graves y otras que te dejan pensando en la propia.
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