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El libro comienza cuando un hombre y una mujer, quienes viven en una isla australiana, encuentran un bote encallado; dentro de él encuentran a un hombre muerto con una bebé viva. Tras pensarlo un rato, la pareja decide quedárselo sin notificar el hallazgo con posibles consecuencias futuras. La verdad es que este es un libro que fácilmente despierta tu curiosidad por que nos platica cómo es que funcionaba el trabajo de un farero en el siglo XX. Además de que se nos describen el método para hacer funcionar el faro. Lo que hace apreciar el trabajo del autor, pues se nota su esmero en la obra. Por otro lado, tenemos el factor del misterio, pues desde el primer capítulo de la novela sabemos que algo anda mal cuando vemos a Isabel y a Tom conversando sobre la bebé Lucy y el hombre fallecido del bote. Lo que nos hace querer saber qué fue lo pasó y es así como la autora nos remonta al pasado de Tom, y es ahí donde comienza el único "pero" que le pongo a esta historia. Fue un acierto que Stedman nos relatara un poco del pasado de Tom porque logra relacionarlo perfectamente con el desarrollo de la historia para dirigirnos a su desenlace y darnos un mejor panorama de la psique de él para entender mejor sus acciones o su forma de pensar, sin embargo, el error en que cayó fue hacerlo tedioso haciendo algunas escenas demasiado largas provocando que el lector se pregunte cuál es la relevancia de lo que está contando. "Una vez que un niño entra en tu corazón, ya no existe ni bien ni mal. Ella sabía de mujeres que habían tenido hijos cuyos padres eran maridos a los que ellas detestaban, o incluso algo peor, hombres que las habían forzado. Y esas mujeres amaban a sus hijos con todo su corazón, al mismo tiempo que odiaban al bruto que los había engendrado". Después de pasada la primera mitad del libro, una vez que la autora nos presenta los personajes y nos pone el contexto, la historia comienza a tomar más ritmo y a ponerse más interesante haciendo casi imposible soltar el libro y comenzamos a cuestionarnos sobre las acciones de los protagonistas si fueron correctas o no. Respecto a los personajes, he de mencionar que tanto como Tom e Isabel me agradaron y logré simpatizar con ellos, pues como he mencionado anteriormente, Stedman crea un pasado—un poco largo— para conocerlos. Y más que nada podemos concluir que M.L. Stedman nos cuenta una historia donde personas buenas llegan hacer cosas mal vistas. |
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