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Este libro llegó a mi vida después de leer, La flor y nata, en esos momentos conocí a la escritora y como me gustó, cuando vi este por 5,95€ en la librería, no me pude resistir y se vino conmigo a casa. La historia empieza con Cecilia, quien a sus más de 40 años acaba de divorciarse y ha decidido abandonar su vivienda en el bonito barrio de Salamanca para trasladarse a la que era la casa de sus abuelos en la Ribera de Manzanares, un lugar maravilloso para empezar de nuevo. Así comenzará la historia de la pensión más bonita del mundo. La novela es muy fácil de leer, está escrita de una forma sencilla y directa, con capítulos cortos, diálogos muy entretenidos y un toque de humor. Es un libro super fresco, perfecto para leerlo en verano. Lo títulos de los capítulos me han encantado, son las normas que Cecilia va poniendo para su pensión, muy pintorescas jeje Los personajes, son creíbles, tienen una evolución a lo largo de la historia y son muy opuestos entre sí. Los mejores, sin lugar a duda, Cecilia y Andrés, sus conversaciones son de lo mejor de la historia. Aunque tampoco puedo olvidar a Justice, un chico de color que vivía a escondidas en la casa de sus abuelos de Cecilia. Hay más personajes, muchos de ellos ocultan secretos y no son lo que parecen pero mis favoritos han sido los anteriores. No podemos olvidarnos de la intriga de la novela, una parte de la trama gira alrededor de una medalla que encuentra Cecilia y que nadie sabe que hacía ahí y de quien era. Es una novela que os gustará si queréis desconectar y pasar un buen rato. Te mantiene entretenido hasta el final. Una novela en la que predomina la amistad y el amor. |
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