 |
La historia de Alice comienza con la repentina muerte de su marido Chris, quedándose viuda y a cargo de una hija pequeña y un embarazo llegando a término. Alice pasará de tener una vida aparentemente perfecta a convertirse en una especie de espía casera. Construirá una ruta a seguir al descubrir que su marido se esforzaba mucho en ocultar un gran secreto y viajará a una isla próxima que se convertirá en el epicentro del gran misterio. Allí conoceremos a sus vecinos, sus parajes, sus rutas y todos los secretos que Cape Cod esconde. La isla será un nuevo hogar tanto para Alice y su familia, como para el lector que lo vivirá todo con ella. El autor dota esta historia de un humor muy peculiar y proporciona un fácil enganche al viaje de Alice, gracias a sus invenciones para investigar a su marido. Ella tiene mucho que superar, mucho que descubrir, mentiras y verdades que sin remedio se irán cruzando en su camino, pero sin ni siquiera saber si realmente está preparada para tirar las paredes abajo. Alice es un personaje que se desarrolla muy bien a medida que pasan los capítulos y se mantiene firme hasta el final. El sentimiento devastador por los recuerdos de su marido casi se puede palpar, al igual que la fuerza que va aprendiendo a adquirir. Es una obra larga, que se construye despacio, sin decaer en ningún momento. Yo la disfruté muchísimo, recuerdo mi viaje con Alice muy especial porque cada pasito que ella daba, yo lo saboreaba casi como si estuviera en aquella isla. Puedo decir que me enamoré de esta aventura. Me dio muchísima pena llegar a su final. |
>
