Este libro se ha convertido en uno de mis favoritos y su protagonista Francie Nolan, en uno de los mejores personajes literarios que yo haya leído. Ha sido una experiencia maravillosa leer esta historia, llena de personajes muy especiales y con una trama que te envuelve y hace que quieras saber más sobre la vida de esta familia Nolan tan particular y entrañable. La autora nos sitúa a principios del siglo XX (decada de 1910) en Brooklyn, zona llena de emigrantes europeos, gente trabajadora, en la mayoría de los casos, muy pobre y que sobrevive como puede en circunstancias realmente duras. En ese ambiente crecen Francie y su hermano Neely y con ellos vamos viendo como van cambiando las cosas y como va avanzando su familia y la sociedad de ese momento. |