El beso azul

Leo mucho a este autor (desde que tengo 14 años y tengo 38) y la sorpresa que me he llevado con este libro ha sido mayúscula, más que nada por la llorera que he mantenido durante el libro. Y es que el tema principal no es para menos, teniendo en cuenta también que soy de lágrima fácil.

Estamos en el año 77 en un pueblo tranquilo donde se respira un ambiente de ilusión a la vez que nerviosismo por las primeras elecciones generales tras 40 años de dictadura, pero la noticia que van a recibir los y las vecinas es más sorprendente que el poder votar. Rogelio , un hombre al que fusilaron tras el golpe de estado al legítimo gobierno de la República, va a volver al pueblo.... ¿Cómo puede ser esto y todos lo dieron por muerto?
Las dudas, los miedos, las alegrías acaparan todos los cotilleos de una localidad aún no ha curado las heridas y que teme que su regreso levante lo más oscuro de unos tiempos fatídico para unos y gloriosos para otros.
Aquí, además, se narra la historias de otros supervivientes que no pudieron huir y se quedaron. Historias desgarradoras que sí bien en esta novela son ficticias, pasaron en realidad.

Todo el libro transcurre en cuatro días y en unos capítulos muy muy cortos, si bien la novela tiene casi 400 páginas. Pero se devora.
Es una novela preciosa cuya dedicatoria bien encauzado por el autor, dice: "A los que todavía esperan que la Memoria Histórica sea una realidad tangible".

Nada más que añadir, solo que espero que la leáis y la disfrutéis tanto como yo.