Las fuentes del silencio

Esta novela consta de 520 páginas dividida en 149 capítulos narrados en tercera persona. Transcurre en Madrid de 1957.

Ana vive en Vallecas junto a su hermana Julia, su cuñado Antonio, su recién nacida sobrina Laly y su hermanos Rafael. Son hijos de republicanos y en aquella época cuanto más pasasen desapercibidos mejor. Ana trabaja en el hotel Castella Hilton y sueña con tener un futuro fuera de la dictadura Franquista. Rafael sueña con que su mejor amigo Fuga se convierta en torero del momento. Julia quiere salir de Vallecas y tener un piso en condiciones y no la chabola donde vive.

Franco quiere estrechar lazos con Estados Unidos y España recibe muchos turistas, que se suelen alojar en el hotel que trabaja Ana. Daniel es Texano y llega a la ciudad junto a sus padres a pasar el verano y conseguir hacer las mejores fotos posibles, para un premio y conseguir su sueño de ser fotoperiodista, mientras su padre hace negocios. Es en el Castellana Hilton donde conocerá a Ana y quedará completamente enamorado de ella y aunque la atracción es mutua, ella no se lo puede permitir, ya que son de mundos diferentes y Daniel no es consciente de la realidad que azota a España.

La novela histórica me encanta y aunque es cierto que muchas suelen ser densa ya os avanzo que no es el caso de esta, que con capítulos muy cortitos y ligeros se lee sin apenas darte cuenta. Entre capítulos también nos encontramos extractos de reportajes que hacen referencia a la época, sobre la llegada de turistas extranjeros a España, la dictadura... Me ha parecido una historia bonita a la par que dura, ya que la situación económica era lamentable, aquellos que habían perdido la guerra o bien eran asesinados o tenien que vivir en silencio y sin llamar la atención. Un tema que trata el libro y a todas nos gustó y nos enfadó mucho era el robo de niños por parte de las instituciones religiosas, algo que aunque se sospechaba no se podía denunciar y que por suerte muchos años después, se ha podido meter manos en el asunto. Esta novela te hace ver la cara más triste de aquella España donde mientras los turistas se lo pasaban en grande en las fiestas y todo era lujo, la población pasaba penurias para poder sobrevivir y donde muy poco de los extranjeros, veían esa España gris. Una lectura que sin duda recomiendo, a pesar de que ha tenido un final muy precipitado que nos ha dejado un poco descolocadas, ya que queríamos saber más y que se podría haber sacado más provecho de alguna de sus tramas
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