La Biblioteca de Carfax nos trae el cuarto ejemplar de la colección Deméter, una colección de novelas cortas de terror contemporáneo. La traducción es de María Pérez de San Román y la espectacular portada pertenece a una de nuestras mejores ilustradoras patrias, Ana Juan. Bañada en dolor y tragedia visceral, "Para ofrecerle placer" de Ali Seay es una inmersión cautivadora en las profundidades del abandono familiar, la locura y la inquietante y desesperada necesidad de conexión. A través de la lente de un adolescente afligido llamado Ben, de tan solo dieciséis años, Seay elabora una historia sobre la mayoría de edad que comienza de manera tradicional pero rápidamente se adentra en los inquietantes territorios de la ficción Weird Punk. Sí, nos adentramos en esa sección del terror que tiene que ver con las mutaciones, el amalgamiento de la carne o la mutilación de la misma, con el concepto de la nueva carne desarrollado por gente como Barker o Cronenberg y que posee también una componente sexual bastante marcada que recuerda por momentos al splatterpunk. Y es que el mundo de Ben, ya destrozado por la pérdida de su padre a causa del cáncer, se aisla aún más con el posterior abandono de su madre. Es en este vacío donde sucede la "cosa" inexplicable que lleva la narrativa de lo ordinario a lo extraño. Un enigmático libro de la colección de su padre, que contiene una inquietante ilustración de una mujer con cuernos, se convierte en el centro de atención de Ben. Aquí la autora utiliza de manera experta este siniestro hecho para presentar una presencia que exige ofrendas, cada una más sangrienta y sustancial que la anterior. En esta historia corta entenderemos perfectamente qué diferencia hay entre terror y horror. Primero sentiremos el terror de nuestro joven protagonista, el saber que algo horrible va a suceder, entender que algo acecha... en cambio el horror es el propio terror hecho realidad, el presagio cumplido... La narrativa es oscura, gráfica, sin disculpas y marcada por momentos de crudo horror. Las increíbles descripciones crean escenas tan vívidamente que parecen saltar de las páginas y anidar en la psique del lector. El ambiente de los sótanos oscuros, las figuras sombrías y la siempre presente e inquietante sensación de ser observado son solo la punta del iceberg. Un libro que no se deja leer, la figura de una mujer terrible siempre hambrienta y esa necesidad de Ben de alimentarla, de ofrecerle cuerpos, sangre... porque él sabe ahora que para tener una auténtica familia, la familia soñada, debe hacer sacrificios... Y tú, amigo lector, mientras lees asombrado, vas entendiendo que en medio del caos la prosa de Seay es un ancla. Las secuencias de sueños se presentan con una claridad que desdibuja las líneas entre la realidad y lo surrealista, invitándonos a ponernos en el lugar de Ben y experimentar su mundo. Estos sueños también sirven como ventanas a la psique de Ben, ofreciendo información sobre su incesante búsqueda de lo que le está ocurriendo. Los temas en juego son variados, profundos y de múltiples capas. Esta no es sólo una historia sobre un niño y una entidad malévola de un libro. Es una exploración del dolor, la resiliencia y los extremos, a veces destructivos, a los que uno puede llegar para sentir una apariencia de conexión. Hay un trasfondo palpable de los efectos de los acontecimientos traumáticos en los individuos, especialmente visto a través de los cambios dentro del concepto de "familia". Porque Ali Seay no se limita a ofrecer otra historia de terror; ella está invitando a los lectores a hacer una introspección. Ella empuja los límites de la culpa y la complicidad, desafiándonos a decidir dónde se encuentra Ben como víctima o como participante voluntario en las espantosas ofrendas. ¿Está manipulado por ese ser? ¿O en realidad quiere participar? Asesinatos, un romance juvenil y el auténtico placer... Esta historia es un rico tapiz de horror, tragedia y emoción cruda. Es una novela que exige atención y recompensa a sus lectores con una historia que es a la vez inquietante y estimulante. Con un ritmo perfecto y una escritura impecable, esta es una novela que permanece contigo mucho después de pasar la última página, instando a reevaluar lo que uno podría hacer en nombre del amor, el sentirse querido y, lo más conmovedor, la familia. + Leer más |