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Empezaré diciendo que este ha sido de mis favoritos del año. Pero también de los más dolorosos. La historia por que nos lleva Addie es, sobre todo, difícil de leer. Es el sentimiento de soledad el que te va a arrastrar a lo largo del libro. Sin duda he llorado más de lo que me esperaba (a pesar de que ya estaba avisada de que iba a ser una obra que llega al alma). Sin embargo a través de su visión también hace que aprecies las cosas que hacen que ella siga queriendo mantenerse con vida. Quizá una de los puntos que menos me gustó son aquellos capítulos desde la perspectiva de Henry, no por él en sí, si no por los sentimientos que produce leer sobre sus tormentas (quien haya leído el libro entenderá). Con todo ello, he amado ver la batalla entre Luc y Addie, en especial la fortaleza que obtiene con cada enfrentamiento. Y aunque el final me haya dejado un vacío (en parte por ese final, en parte por acabar la historia) lo que queda claro es que Addie es un personaje para recordar. |
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