Por suerte en este caso las expectativas no me han jugado una mala pasada, y sí, toda la fama que tiene es merecida. El dibujo no me ha entusiasmado demasiado pero eso queda en segundo plano, realmente aquí lo importante es la historia que nos cuenta: la historia de Irán, y especialmente, de los iraníes. Es una historia dura y difícil, llena de represión y, sobre todo, de retroceso. Teñido con gotas de ansía de libertad y ganas de vivir y luchar.
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