Comencé a leer Persépolis por la iniciativa #marzoasiático, y lo he terminado hace unos días, en celebraciones previas al día de la mujer y en mitad de una guerra… y siendo el libro que es, parece que la ocasión la pintan calva. Es una magnífica novela gráfica, que se ha ganado su fama a pulso. Escrita de forma autobiográfica, la autora iraní relata su vida en la niñez y adolescencia en medio de la revolución islámica de su país, que a veces no entiende y otras batalla de forma incansable y rebelde, tal y como es su personalidad. Confieso que alguna lágrima ha caído porque es dura, pero también risas ya que tiene muchos momentos divertidos y tiernos. Es indispensable! |