Entre los muertos

Nerea Arruti, agente de la Ertzaintza, viaje en coche con su amante, un hombre casado. Han pasado un fin de semana romántico en la casa de veraneo de él, en un idílico lugar de Illumbe, y regresan a casa. Pero sufren un accidente, el coche cae por un terraplén y él resulta herido en el tobillo. Como no se puede mover, deciden que él se quede ahí mientras Nerea va en busca de ayuda. Pero al día siguiente, Nerea descubre que él ha muerto. No se lo puede creer, no tenía más heridas que varios rasguños y contusiones y la lesión del tobillo, ¿qué ha podido pasar? Guardándose para sí su pena, Nerea y su equipo son los encargados de investigar la muerte de su amante, todos pensando que ha sido un accidente y ella sin poder contar lo que realmente ha pasado. A partir de aquí las cosas no pueden sino complicarse cada vez más.

Con “Entre los muertos” llegamos al final de la trilogía de Illumbe. Aunque los tres libros guardan entre sí las suficientes similitudes para ser considerados trilogía, las historias son independientes por completo y realmente podría leerse este libro sin haber leído los anteriores. Sí que es cierto que Nerea Arruti ya salió en entregas anteriores pero lo hizo en un papel secundario, ésta es la primera vez que es la protagonista. También es cierto que hay algunas referencias a los dos primeros libros pero son solo eso, referencias: los que los hemos leído probablemente las disfrutaremos más, los que no tampoco van a perderse ni mucho menos.

Me ha gustado mucho Nerea en el papel de protagonista. Un papel muy difícil en esta ocasión porque es doblemente protagonista, a su pesar. Por una parte, forma parte del equipo investigador; por otra, forma parte de la trama criminal, de lo investigado. Ella sufre pues ha perdido a la persona que amaba; al mismo tiempo, tiene información que puede ayudar a esclarecer el crimen pero no puede darla sin incriminarse y sin reconocer la relación que la unía al fallecido. Por otro, algo raro pasa en la comisaría y Nerea ya no sabe en quién puede confiar. Por suerte, uno de sus compañeros va a ayudarle a intentar averiguar la verdad. Gracias al protagonismo que adquiere Nerea, acabaremos por conocerla bien. No sólo cómo es ella y cómo es su vida en la actualidad sino su pasado: la relación con su madre, la relación con su tío policía, etc… Algunas cosas del pasado saldrán a la luz.

Uno de los puntos fuertes de esta novela y de las dos anteriores es Illumbe, el escenario en el que transcurren los hechos. Un lugar en la costa vizcaína que en realidad no existe; parece mentira porque el autor nos traslada allí con la imaginación pero no existe en la realidad. Sin embargo, podría ser como muchos otros pueblos costeros vascos, con sus paisajes, su clima siempre horrible en las novelas de la trilogía, así que no es difícil “verlo” y ver todas las localizaciones en las que transcurre alguna de las escenas.

Me ha encantado “Entre los muertos” como me encantaron las dos entregas anteriores. Hay gente que dice que esta es la mejor de las entregas, a otros les ha gustado menos… yo, sinceramente, no sé qué decir pues los tres me han gustado por igual. Son novelas super entretenidas, que me han mantenido absorta los pocos días que me ha durado la lectura. En esta ocasión la trama me ha parecido original y super consistente, bien llevada y bien resuelta tras muchas sorpresas y giros. Y el papel de Nerea, repito, espectacular.

Conclusión final

Me da pena que con esta novela Mikel Santiago haya puesto fin a la trilogía de Illumbe. Es una pena relativa porque sé que ya sea en Illumbe, ya sea en cualquier otra localización, el año que viene disfrutaré con una nueva novela de este autor que tanto me gusta.
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