El bosón de Higgs

Javier Santaolalla es un físico español que goza de cierto renombre entre la comunidad hispanohablante por su canal de Youtube llamado Date un voltio, un canal de divulgación dedicado principalmente a la física. Javier lo hace de manera atrapante y sobretodo, muy cercano a los jóvenes para de alguna manera intentarles meter el bicho de la Ciencia.

Este libro es un recorrido actualizado por la historia de la física desde la antigua Grecia hasta los temas que están de boca en boca de los físicos y que son el tema principal de investigación actualmente.

Es un libro de divulgación escrito para los jóvenes de ahora, tanto en estilo, diagramación y en los ejemplos que usa. Ya hubiera dado yo cualquier cosa siendo más pequeño para haber tenido un libro del tipo, pero hay que entender que eran otros tiempos y que en la época antes de Internet todo nos llegaba en diferido; aunque tampoco me siento mal por haber visto desde pequeño las retransmisiones de Cosmos del gran Sagan.

Creo que el error más grande del libro —y lo voy a mencionar desde ya para que sea un tema sanjado de un tajo— es haber optado por usar más de 4 fuentes para intentar darle un tono "fresco" y de youtuber al asunto, algo que sobra, distrae y que cansa mucho a la vista.

Santaolalla hace un repaso de los más grandes acontecimientos y conceptos de la historia de la Física de una manera cercana y usando un lenguaje coloquial que ayuda a comprender la esencia del mensaje, más que llenar el libro de términos técnicos que lejos de ayudar en la divulgación, aburran. Este es un elemento que sabe manejar muy bien él, pues es un divulgador de larga data.

Un libro que se hace muy ameno de leer y que va intercalando contenido "duro y serio" con alguna que otra broma, de un nivel que va ascendiendo al correr de las páginas y en el cual el autor incluso narra su experiencia personal en el CERN y aplicaciones prácticas del uso de la antimateria.

Personalmente me ha encantado que haya usado personajes de El Señor de los Anillos junto con otros tantos de la cultura popular en los primeros capítulos como un hilo conductor de la historia. Esto, quizás, lo haya hecho para darle un poco más de notoriedad a la historia de la disciplina en las épocas anteriores y que no resultaran tan monótonas para el lector.

Creo que libros del tipo hacen mucha falta en el mercado, pues hay un vacío enorme en la divulgación en Ciencia que se hace para un público en general y para los más jóvenes de la casa. Esto se nota en todas las áreas del conocimiento, y es algo fundamental en lo cual se debe trabajar para enganchar a las nuevas generaciones con las grandes maravillas que tiene la Ciencia entre tus haberes, no con el fin de que todos el día de mañana sean científicos sino con miras a que se les pegue el bicho de lo más fundamental que tiene la Ciencia en su interior: el sentido critico y el método que se usa. Si las nuevas generaciones ven, captan e interiorizan eso; bien sea que se dediquen a la Ciencia o no, serán menos susceptibles de creer cualquier cosa que se les diga.

Esto es más una invitación a que si algún científico lee esto algún día, y quiera hacer algo del tipo, se anime y lo haga sin temor alguno, pues es un campo vacío que espera ser llenado por gente que se apropie del cuento y lo disfrute bastante. Hay que arriesgarse a ser capaz de contar lo que hacemos en el laboratorio en palabras coloquiales, a que nos dejen de mirar como bichos raros y que sepan que nuestros trabajos son igual —o más— apasionantes de los que ellos piensan.

Un tanto tedioso e infantil. Lo recomiendo para gente muy joven, aunque los chascarrillos que hace seguramente no serán entendidos por estos, pues son más de mi generación. Es un libro que no sabe estar enfocado a ningún público en concreto... Creo que ese es su principal problema ya que el contenido es bueno me general, es la forma de contarlo donde creo que falla.