Un delicioso y pequeño bocado. Es la sensación que tengo al terminar este libro. Como los wagashi que describe la autora en su novela. Escrito estilo carta, este libro es además de novela negra un viaje introspectivo de la vida de la protagonista, Olivia. Conocemos secretos íntimos, sórdidos, de la relación con su marido. Una relación insana y retorcida que va modelando su carácter. Es desde luego una novela muy diferente a las habituales de este género. Y me ha encantado. |