Juramentada

Todavía no sé si me gusta reseñar libros de Sanderson o no, porque sus libros de fantasía me encantan, pero explicarme se me hace verdaderamente difícil.

Esta tercera parte continúa con la historia de Roshar y, además, está centrada en la evolución de Dalinar (el primero trataba de Kaladin y el segundo de Shallan). Así que en este libro se revela por qué Dalinar, conocido como el Espina Negra, actúa de la forma en que lo hace y qué lo llevó a convertirse en el hombre que es.

Es una historia más pausada y con menos acción, pero igualmente maravillosa. Reconozco que los capítulos del pasado se me hacían algo pesados (no por la redacción, sino porque el Dalinar joven se me hacía extraño). Y, ay, cómo me equivocaba con esta pesadez. Creo que es el personaje que mejor evolución ha tenido hasta ahora. El más complejo, el más derrotado, el más humano. Sin duda, me ha calado, y mucho.

En cuanto a la trama del presente, solo puedo decir que el giro final me ha parecido brutal y también muy acertado. Sanderson sabe lo que hace y se nota que este proyecto lo tiene planeado por completo. Y sé que, al igual que con Nacidos, no dejará ningún cabo suelto.

Y digo esto por una de las escenas finales. No quiero revelar nada, pero hay cierta elección que no me esperaba. Es cierto que tiene que alargar de alguna manera lo que está por venir. Sé que Sanderson suele quitar la esperanza, espachurrarla y luego darte otra nueva que, si bien es algo diferente, es incluso mejor que la que tenías antes. En fin, que este señor siempre da lo que debe darse.

Me gustaría hacer un último apunte en cuanto a su forma de hacer las cosas. Estos libros son muy largos, por lo que él los divide en partes, y entre parte y parte añade los interludios, que son varios capítulos de personajes que están en otra parte del planeta, que no parecen relevantes, pero luego resultan ser "importantes" en la trama (aquí se ve que lo tiene todo atado). Pues en cada parte la tensión va aumentando hasta que llega el interludio, que es lo que se conoce como anticlímax, y aquí es donde quiero hacer hincapié, porque es muy muy difícil introducir varios anticlímax y que queden bien. Pero él lo hace y ahí es donde se aprecia el talentazo que tiene este señor.