Este libro es una maravilla, una historia tierna y preciosa. Una aventura onírica plagada de aventuras, amistad, autoestima y superación. Un libro infantil, pero con unos valores intrínsecos tan profundos, que se disfruta igualmente de adulto. El mensaje de Iria se debe gritar alto y claro, y debe ser la bandera que ondee en nuestros días. Las ilustraciones son preciosas, cuidadas, llenas de vida y color. Y la historia tras el libro, pues tan bella como las personas que han formado parte de él. Gracias por este pedacito de vosotros.
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