Creo que nunca me sentí tan identificada con un personaje como lo he hecho con Leah. Yo También tuve una Linda y me vida y eso me convirtió en la diana fácil de manipular, como a la protagonista. Una historia bonita, tierna, con pequeños toques de humor de la mano del grupo de amigos y que pone en alza el valor de la amistad y las relaciones sanas |