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En este libro seguimos aprendiendo magia y sobre este fantástico mundo al mismo tiempo que lo hace Harry, quien tras pasar un tedioso verano con sus tíos es rescatado por Ron y sus hermanos gemelos, Fred y George, en un coche volador para acabar el verano en la casa de la familia de magos Weasley antes de comenzar el segundo curso en el Colegio Hogwarts de Magia. Un libro más dinámico que el primero, en el que nos encontramos con menos descripciones tan detalladas ya que vamos conociendo cada vez más este mundo y el cual se sumerge en la acción mucho antes. Nos trae nuevos personajes como Ginny, la hermana pequeña de Ron; Dobby, el elfo doméstico o Gilderoy Lockart, el nuevo profesor de Defensa contra las Artes Oscuras y donde nuestro protagonista, junto a Ron y Hermione se sumergen en nuevas y mágicas aventuras. En este caso, la cámara de los secretos ha sido abierta y hay extrañas y peligrosas criaturas y monstruos sueltos, pero sobre todo tendrán que descubrir porqué se están quedando petrificadas tantas personas en el colegio y porqué Harry oye voces extrañas. Dividido en 18 capítulos, tenemos por delante 284 páginas de aventuras que se leen de forma rápida y amena, te sumerges tanto en la lectura que pasas capítulo tras capítulo en un abrir y cerrar de ojos. Lectura apta para toda la familia donde se resaltan valores como la amistad, defendiéndose y confiando unos en otros a pesar de las circunstancias, el trabajo en equipo, la lealtad o el valor y se tratan temas como la discriminación a determinados compañeros por sus características. Rowling nos vuelve a sumergir haciéndonos amar y odiar a los diferentes personajes, dándonos pinceladas del libro anterior y construyendo nuevos escenarios que seguro nos acompañarán en los siguientes libros. |
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