El Reino

“En mi reino, ser felices para siempre no es solo una promesa; es una regla.“

🏰 Ana llora la muerte, Ana sueña, siente, ama, pero el problema es ese. Las emociones no deben tener cabida en la vida de una autómata. Y mucho menos en el Reino, el parque temático en el que solo existen finales felices y clientes contentos.

🏰 Ana es una de las siete fantasistas de ”El Reino”, creada para complacer a los humanos en un lugar de ensueño en el que los deseos parecen hacerse realidad. En el que vislumbrar animales ya extintos y novedosos híbridos es posible gracias a la ingeniería genética, en el que viajar a través de diferentes ecosistemas en pocos minutos resulta factible. En el que las princesas de cuento existen y sin embargo los príncipes no resultan viables.
En este lugar de “ensueño”… Un cuerpo está siendo arrastrado. Acaba de producirse un asesinato. Y la principal sospechosa es Ana.. Las cámaras no mienten. Pero… ¿Qué la ha llevado a cometer el crimen? ¿Por qué se empeña en parecer inocente si existen numerosas pruebas contra ella?

🏰 Un libro con una sinopsis bastante atrayente en la que se hace mención a una especie de combinación entre las princesas de Disney y Westworld, serie que siento decir todavía no he visto aunque por su argumento ya se intuyen algunas semejanzas con este libro. Quizás yo también añadiría un toque de ”Dark Mirror”.

🏰 Mucha ciencia ficción en esta historia que ahonda en los dilemas éticos que plantea el uso de la robótica como medio para mejorar la vida del ser humano. ¿Hasta que punto el ser humano tiene el derecho de crear seres similares o no a él para esclavizarlos y satisfacer sus deseos y necesidades? ¿ Podría un robot, ciborg o autómata ser capaz de desarrollar emociones? o ¿Hasta que punto desconectar un robot o maltratarlo podría considerarse o no un crimen?

🏰 Mientras se nos van planteando este tipo de interrogantes vamos conociendo poco a poco a Ana, vemos como ella misma se pregunta si sus nuevos miedos, ese interés suyo por los demás híbridos o esos sentimientos que comienza a sentir hacia un trabajador del parque son un error de programación. ¿Su existencia es importante? Y con ella vemos la maldad del ser humano. Sus luces y sombras. Sus mentiras. Su necesidad de control… Porque obviamente las fantasistas del parque se encuentran vigiladas, monitorizadas de continuo. Sin ningún tipo de libertad.

“No dejes que papá lo vea. Llorar no es una fantasía.“

🏰 Un libro con una estructura muy interesante y novedosa que gracias a los fragmentos de entrevistas, guiones de anuncios del parque temático, publicidad, notificaciones de mensajes, recortes de periódico, grabaciones de pruebas y cartas resulta muy dinámico. También los saltos temporales que nos van contando la historia antes y después del juicio que se le realiza a Ana contribuyen al disfrute de la lectura además de dotarle de misterio. al final parece que el lector esté llevando a cabo una investigación por su cuenta. Juzgando cada sentimiento de la protagonista y demás personajes, intentando entender sus movimientos, ansiando libertad.

🏰 Una ambientación sobresaliente que ya se presiente gracias al mapa que acompaña la historia en el que se muestran diferentes y curiosas zonas del parque temático como: Sueñolandia, Invernolandia, Dulcelandia, Marinolandia o Imaginolandia entre otras.

🏰 Una de mis mejores lecturas de este año.

Hay argumentos que me pueden vender un libro con una sola línea: ¿Y si Westworld se combinara con Disney World? Imaginen qué pasaría si las princesas de los parques al estilo Disney no fuesen chicas disfrazadas sino unos híbridos humano/máquinas diseñadas para cumplir con las fantasías de los visitantes. ¿Qué ocurriría si uno de esos androides tan realistas y programados para no mentir fuese capaz de cometer un asesinato y negase haberlo hecho? Ese es el intrigante argumento de la alucinante historia de la que les quiero hablar hoy: El Reino, de Jess Rothenberg. Un libro que nos llega en una cuidada edición de Nocturna y con la traducción de I. C. Salabert.

«En el Reino —mi Reino—, ser felices para siempre es el único final que existe».

En la novela conoceremos a Ana, una de las siete fantasistas que viven en El Reino, un parque temático que contiene atracciones alucinantes: desde la montaña rusa más alta del mundo, hasta las únicas pistas de esquí con nieve real que quedan en el planeta. Pasando por atracciones virtuales de todo tipo, y una cantidad cada vez mayor de animales extintos que vuelven a la vida gracias a los laboratorios de bioingeniería que hay en el parque.

Eso sin contar con los ejemplares de animales que no existen en la naturaleza y que ellos mismos crean mediante ingeniería genética, como los caballos alados. Laboratorios en los que diseñaron también a las fantasistas: unas autómatas que tienen un cuerpo que parece completamente humano y que es un híbrido de carne y metal. Princesas animatrónicas de apariencia perfecta, programadas para que entretengan y complazcan a los visitantes del parque. Creadas con el fin de que cumplan sus fantasías.

«Somos preciosas. Somos amables. Somos de colores tan variados como el arcoíris, creadas para celebrar la solidaridad internacional y reflejar el mundo diverso en el que vivimos. Nos encanta cantar, sonreír y ofrecer experiencias. Nunca alzamos la voz. Nuestra prioridad siempre es complacer. Nunca decimos no a menos que sea eso lo que quieres oír. Tu felicidad es nuestra felicidad».

El libro empieza cuando descubren un cadáver en El Reino. En el momento en el cuerpo de Owen, uno de los trabajadores del parque, es captado por las cámaras con signos evidentes de que ha sido asesinado. Y todo apunta a que es Ana, una de las fantasistas, la que ha cometido el crimen. Así, mediante fragmentos del pasado, mezclados con partes del juicio y los testimonios allí presentados, que descubriremos paso a paso qué pudo haber llevado a un androide programada con la finalidad de complacer y sin la capacidad de mentir, a cometer un asesinato y negarlo.

Es precisamente rememorando el pasado de Ana que descubriremos cómo funciona El Reino y los muchos secretos que esconde. La manera en la que las fantasistas son tratadas, así como el destino de esos animales híbridos y extintos que se encargan de revivir, en teoría, con fines puramente altruistas. Ir recorriendo el parque con sus muchas atracciones y desentrañar sus muchos secretos es adictivo. Y aunque es fácil imaginar parte de la oscuridad que se esconde en ese lugar lleno de luz y fantasía, hay más de la que en un principio podríamos creer.

«Pero las historias pueden desaparecer. Las historias pueden reescribirse. Moldearse. Reinterpretarse»

Androides, princesas, animales extintos, un parque creado con la finalidad de hacer realidad todos tus sueños, un asesinato… El Reino, de Jess Rothenberg es una novela llena de secretos y de crítica social. Que no solo nos plantea el dilema ético de crear híbridos humanos/máquinas para complacer nuestros deseos, o revivir especies con el objetivo de entretenernos, para que sean una atracción más en un parque sin importar su bienestar. Sino también pone foco a los roles de género, esos que se imponen a las mujeres: a la manera en la que se nos educa para complacer, no levantar la voz, no molestar. Si están buscando una historia adictiva y llena de giros, tienen que darle una oportunidad.

¿Han leído El Reino? ¿Les llama la atención?
Enlace: https://inthenevernever.blog..

¿Os imagináis que existiese un parque temático de Disney pero con un toque de Westworld? Con robots humanoides de las princesas y siguiendo las leyes de Asimov.

Eso es lo que nos plantea este libro y como soy fanática de ambos, a por él que fui.
El libro comienza justo en un juicio. Han acudido los responsables tanto del parque como de ellas. El juicio es contra Ana, una de las fantasistas, pues a asesinado a alguien.
Y jugando con la linea del tiempo, asistiremos tanto al juicio, cómo a los recuerdos de ella.
Nos enseñará el parque, sus reglas, la belleza que desprende, la relación con sus hermanas y trabajadores del parque, y la ¿perfección? de ese mundo del que tienen totalmente prohibido salir.

Al principio me sacaba de la narración tanto cambio, pero me fui acostumbrando y ya me metí de lleno en la trama.
La historia está bien llevada y te va creando curiosidad queriendo saber más de ese super parque y qué está ocurriendo con las fantasistas.
Hay algunas partes del libro, o cierto personaje repulsivo, que me descuadraban pero cuando echas cabeza piensas "sí, seguro que esto podría ocurrir desgraciadamente".

Ana se me hizo un poco repetitiva en algunas partes. Pero entiendo que al ser un robot la pobre no sabe de la misa la mitad. Así que se lo perdono 😂.

El final es abierto o al menos eso me pareció en su momento, ya que me quedan algunas preguntas. Y la verdad es que me gustaría pensar que habrá una siguiente parte. Ojalá saque un libro de cada una de ellas.

Este libro me llamó la atención desde el primer momento, además de por su portada, por la ambientación. La idea de mezclar Westworld con Disneyland me pareció muy original. A pesar de que no me suelen tirar mucho la ciencia ficción y el misterio, decidí darle una oportunidad.

Me he llevado una grata sorpresa porque me ha mantenido enganchada de principio a fin la historia de Ana, su evolución y el juicio, no solo por el asesinato sino por los dilemas que acarrea el uso de Inteligencia Artificial y sus límites.

Pensé que me liaría más con los saltos temporales en la narración, pero no ha sido así, todo me ha parecido muy bien hilado y la edición, cambiando de color algunas páginas, ha ayudado bastante.
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