La noche que paramos el mundo

Lo más sencillo sería decir aquello de "no era el momento para leer esta novela", pero dudo que hubiera momento bueno, sé que esta novela no es para mí. Tampoco voy a basar mi valoración en si me ha gustado o no, pues eso es muy subjetivo. Intentaré justificarlo en mi opinión, aunque es inevitable que nombre lo que no me ha gustado. Según los rumores, esta novela tenía todos los números para ser un dramón, y a mí no me ha conmovido en ningún momento. de hecho, precisamente se tocan muchos temas que podrían haber alimentado la atmósfera dramática y para mí se ha quedado en el intento. le ha faltado profundizar, crear ese momento épico que pellizca el corazón. Porque los temas tratados pueden resultar de los que sobrecogen, pero la autora pasa tan de puntillas en algunos de ellos que ni siquiera los llama por su nombre. A veces es mejor explicar que nombrar, es cierto, pero cuando lo que se explica lanza mensajes contradictorios, uno acaba perdiéndose en un mar de suposiciones. Voy a dar un ejemplo (espero hacer bien lo de los spoiler) para que no parezca que me lo estoy sacando de la manga.
Una persona que está desahuciada por una enfermedad terminal, que supongo que es algún tipo de cáncer aunque la autora no lo dice, no puede describirse hasta el fin de sus días como una persona vigorosa, fuerte y que emana energía, además de que es capaz de tocar en un concierto sin despeinarse cuando se supone que ya le fallan algunos órganos
Ejemplos como el de arriba han hecho que no me crea la historia, que no me llegue. Además, me ha parecido lenta y agotadora por la forma de expresarse de los personajes, hablando mucho para no decir nada a causa de un lenguaje "poetizado" cual grupo de pop indie (que no rock), sin salirse ni un solo momento del papel. ¿Quién habla así hoy en día? Me ha resultado imposible identificarme con los personajes, ni siquiera con su conflictos, porque en algunos casos no he sabido con exactitud qué les pasaba. La forma de actuar de los personajes era inconsistente en ocasiones, rozaba lo absurdo, y los momentos que podrían haber sido memorables me han resultado un chasco.
¿Su primera y única vez en una casa en ruinas con peste a orín, en el suelo mugroso sobre una toalla? ¿En serio? ¿Y qué es eso de ir a pedir consejo a la madre cuando ha sido una harpía con ella toda su vida? ¿Y su nana a la que tanto quiere dónde queda? ¿O es que era para provocar la típica situación en la que la madre va a hablar con el chico para "sobornarlo" y que deje a su hija? Otro momento que dada la relación entre madre e hija me resulta del todo inverosímil.
Sé que hay una segunda parte, pero, como digo, no es para mí. Sobre gustos, colores, evidentemente, pero creo haber justificado por qué no tengo intención de leerla.