Un libro triste y muy dramático pero que ha conseguido emocionarme. La verdad es que cuando empecé a leer esa prosa tan poética, sentía que me sacaba de la lectura pero una vez me acostumbré acabé marcando muchas frases bonitas. La historia de Damien y Gabrielle es super trágica y llena de eventos desafortunados pero también tiene muchísimas personas que merecen la pena y que me ha encantado conocer. Gavin, Eva, Adele, Kitty, Julie, Cleo... son de lo mejorcito que me he encontrado en la literatura y han aportado el contrapunto dulce a una historia que de otra forma hubiera sido demasiado triste. Es la primera obra que leo de la autora pero no será la última. |