Monsieur Picquier siempre dice que un día sin haber leído es un día perdido. Y tiene toda la razón. Vendió su librería para instalarse en una residencia, Les Bleuets, y allí llevó una pequeña cantidad de sus libros, solo 3.000, desprenderse de los demás le ha hecho sufrir mucho pero algo debe pasar porque no los lee. Grégoire Gelin a quien no le gusta leer y ha dejado los estudios, empieza a trabajar en la residencia. Descubre que Picquier no lee porque no ve y se convertirá en su lector y aquí es cuando descubre un nuevo mundo. Este libro es una maravillosa joya que no me ha podido gustar más . Me ha gustado porque está escrito de una forma fluida, bellísima y muy emotiva. Me ha gustado porque es un homenaje a la literatura y a todos esos lectores a los que los libros nos descubren otros mundos, otras vidas, nos curan, nos sanan el alma, nos ayudan a vivir porque son nuestra terapia. Me ha gustado porque es un homenaje a la amistad, una amistad entre dos personas separadas por la edad y por la forma de ver la vida, a la generosidad y al amor. Me ha gustado porque nos ha mostrado el nacimiento de un lector, como evoluciona y como consigue la felicidad gracias a los libros. Me ha gustado mucho y os lo recomiendo porque es una auténtica delicia sobre todo para nosotros, que no entendemos un día sin leer. Enlace: https://instagram.com/mi.ter.. |