Un gran testimonio de valor histórico, para recordarnos la estupidez de la guerra, la realidad que viven los que van al frente, de un bando u otro, lo triste de ver como unos con poder y ego, desatan el mismo infierno el cual solo padecen los ilusos, los pobres y aquellos peones que pasan a ser carne de cañón, para ganar posiciones en un frente, donde al final, nadie sale realmente vencedor.
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