Sustancia de hígado: 18

Es tanta y tan habitual la violencia que nos rodea y a la que estamos sometidos a diario, de una u otra manera; es tal el bombardeo de información sobre hechos horribles al que estamos acostumbrados, que hemos hecho de la violencia una cotidianidad.

“Sustancia de hígado”, de Michelle Recinos, es una colección de relatos que aborda precisamente este tema, la normalización de la violencia, la habituación a ella, incluso la institucionalización de la misma. Una obra escrita desde las entrañas, desde el mismísimo hígado realmente, tan crítica y con tal poder de poner en evidencia a personas y gobiernos que su publicación le costó a la autora la censura en su país de origen, El Salvador.

Relatos que ponen en evidencia hasta qué punto se ha asentado la violencia en el mundo actual y nosotros en ella: la explotación de la pobreza como reclamo publicitario, el aprovechamiento del dolor de las víctimas para lucrarse, la incomodidad que nos produce ver o sentir que el otro lo está pasando mal, la indiferencia hacia el sufrimiento ajeno, la explotación de personas como si fueran mercancía…

Un libro impregnado de una sustancia viscosa que nos envuelve durante toda la lectura, pegajosa, desagradable. Una sustancia como bilis, verde y maloliente, que nos acusa en cada línea del relato, que nos alcanza y nos cuestiona, que consigue que seamos nosotros mismos quienes lo hagamos para darnos cuenta de lo acostumbrados que estamos a sufrir y a ver cómo otros sufren, de lo poco que llega a importarnos, de lo tranquilos que estamos cuando vemos que el horror queda lejos, fuera de nuestras fronteras, de nuestro ambiente, de nuestro hogar.

Un libro crítico y duro, aunque de una dureza “amable”, sibilina, que te alcanza como un chapapote invisible que invade tu cuerpo entrando por cada poro, sin necesidad de mostrártela de forma explícita, sino más bien indirecta, insinuada.

Una obra que se lee sin darse cuenta, que atrapa y molesta pero que ayuda a quitarse esa dichosa cáscara de indiferencia que llevamos puesta.