InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de AGamarra


AGamarra
05 July 2022
"En una estación balnearia como era Balbec, supone un gran encanto añadido a la vida que el rostro de una muchacha bonita, una vendedora de conchas, de dulces o de flores, pintado con vivos colores en nuestro pensamiento, sea para nosotros cotidianamente, desde por la mañana, el objetivo de cada una de esas jornadas ociosas y llenas de luz que pasamos en la playa"

Lamentablemente estoy haciendo esta reseña muchos meses después de la lectura pues recién he terminado de poder transcribir todas las notas que tomé de este libro. al hacerlo he descubierto muchas buenas frases y pienso que debería darle 4 estrellas a este libro, claro, el leer las mejores frases hace olvidar todo lo demás pero en su momento al leerlo me pareció que 3 estrellas era justo. No puedo recordar toda la lectura pues es muy compleja y de muchos sucesos y tampoco quiero releer todo o parte del libro para poder hacerla. La tenía pendiente y ahora creo puedo complir algo mejor aunque con lo negativo que es que haya pasado tanto tiempo.
Este libro nos cuenta la evolución del joven Proust quien tiene diversos aprendizajes como el de M. de Norpois quien inclina a Proust hacia la literatura o su sorpresa al ver a la Berma en la ópera. Aquí Norpois habla mal de Bergotte, quien en el anterior número llamaba la admiración del autor.
Desde luego, se cuenta también el matrimonio de Swann que como comenté en mi reseña anterior debió hablarse en el primer libro pero por motivos editoriales se cortó y se trata más profundamente en esta parte. Debido a Gilberte, empieza un mayor acercamiento del joven Proust con ella pero sobre todo con sus padres Swann y Odette. Quienes al inicio tienen un poco de defensa contra el joven, hay una carta de por medio muy interesante. Me gusta cómo evoluciona esta parte de su relación. Hay mayor intimidad del joven Proust con los Swann y conoce sus costumbres (como la vida galante que se niega siempre a Odette a pesar de todo) y hay un curioso cruce con la princesa Matilde Bonaparte. Se habla de Musset que es uno de mis autores favoritos. La relación con Gilberte es interesante en la medida que se nos explica que el autor veía en ella en realidad a los padres, incluso en sus expresiones o sus miedos. Es de alguna manera creo toda la obra un paralelismo entre Swann y Proust y eso me parece muy bueno.

"Existe cierta semejanza, aunque siempre en evolución, entre las mujeres que amamos sucesivamente, semejanza que proviene de la fijeza de nuestro temperamento por ser él quien las elige, eliminando todas aquellas que para nosotros no serían opuestas y complementarias a la vez para nosotros, es decir adecuadas para satisfacer nuestros sentidos y hacer sufrir a nuestro corazón. Son estas mujeres un producto de nuestro temperamento, una imagen, una proyección invertida, un «negativo» de nuestra sensibilidad"

Luego de unos años viene la estancia en Balbec, esta ciudad a orillas del mar, que será el punto principal de toda la última mitad y desde luego da origen al título de la obra presente. Aquí, el joven Proust se encuentra con un grupo de muchachas distintas en gran parte a Gilberte, la mayoría de clase alta así como toda la gente que convive en el balneario y en los hoteles cercanos. Las descripciones de Proust son muy buenas en este punto sobre el despertar de la sexualidad, de la atracción que tiene en los jóvenes ver cuerpos lozanos y sonrisas entusiastas, nos transporta de alguna manera en la sensación que provoca ver a "las muchachas más hermosas que puede ofrecer la vida". Y el joven desde luego se ve contagiado por este impresionante hálito de vida y cambia muchas de sus actitudes y trata de mezclarse en aquel ambiente en el cual hasta hace poco se sentía menos que otros jóvenes más ricos y apuestos. Para ello cuenta con la ayuda de sus nuevos amigos como Robert Saint-Loup (sobrino de Mme. de Villeparisis) y sobre todo el pintor Elstir. También conoce a Bloch y sus hermanas cuya costumbre de hablar como los héroes de Homero me sacó más de una carcajada.
Como siempre algunas frases que no me gustaron y no entendí como ésta:
"Y - como el que quiere hacerse el nudo de la corbata delante de un espejo y no comprende que la tira que ve no está respecto a él en el lado al que dirige su mano, o como un perro que persigue en el suelo la sombra danzante de un insecto - engañado por la apariencia corpórea como lo estamos en este mundo donde no percibimos directamente a las almas, me eché en brazos de la abuela y suspendí mis labios en su rostro como si de este modo accediese al corazón inmenso que me abría"

Una buena lectura en fin y espero poder seguir leyendo y reseñando las novelas de este ciclo. Creo que me queda mucho que hablar sobre la pandilla de las muchachas y las sensaciones del autor en primero considerarlas como un todo y luego individualizarlas. Sus coqueteos con algunas de ellas pero no me parecieron tan serias esas ideas por eso no las retengo tanto. Estoy seguro que a muchos sí les interesará más.

"Si la muerte hubiese debido golpearme en ese momento, me hubiera parecido indiferente o más bien imposible, porque la vida no estaba fuera de mí, estaba en mí; habría sonreído de conmiseración si un filósofo hubiera emitido la idea de que un día, incluso lejano, yo habría de morir, de que me sobrevivirían las fuerzas eternas de la naturaleza, las fuerzas de aquella naturaleza bajo cuyos pies divinos yo sólo era una mota de polvo; de que después de mí, ¡seguirían existiendo aquellos acantilados redondeados y abombados, aquel mar, aquel claro de luna, aquel cielo! ¿Cómo iba a ser posible, cómo iba a poder durar más el mundo que yo, si yo no estaba perdido en él, si era el mundo el que estaba encerrado en mí, en mí a quien él estaba muy lejos de llenar"
Comentar  Me gusta         152



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(14)ver más