La cabaña

Segundo libro que leo de la autora y creo que puedo decir que será el último. Sobre el genero en cuestión no voy a decidir nada por ahora, por que en thrillers juveniles soy muy novata y no voy a juzgar todo un genero por dos libros de una sola autora. Pero como dije al empezar con Preston sí he terminado, su estilo no es para mi por qué este libro me ha gustado incluso menos que "El sotano". Todos los fallos que para mi tenía esa historia, la simpleza, la falta de lógica y realismo, el poco aprovechamiento de la trama, la nula explicación de la parte policial... aquí los encuentro en mayor medida aun.

En este libro nos cuentan el fin de semana de un grupo de amigos que ya vienen arrastrando traumas y rencores de un accidente de meses antes, pero estos días apartados no arreglan nada por que dos amigos aparecen asesinados. El resto del libro tratará de averiguar que ocurrió y quien lo hizo, pero todo ello narrado desde el punto de vista de un único personaje, Mackenzie, una de las chicas del grupo de amigos. No hay ninguna trama policial así que lo poco que vamos sabiendo viene del intento de investigación que se marca la chica sin ninguna lógica y razonamiento. Tenemos que ver como sus pensamientos se contradicen de un párrafo a otro, diálogos absurdos como dejar una posible prueba en comisaria y preguntar diez minutos después a la persona que iba contigo (y sigue contigo) si ya le han llamado con resultados. Estamos hablando de personajes de entre 18 y 20 años, que a ver, no son completamente adultos pero tampoco son niños de chupete, se espera un poco más de ellos sinceramente. Lo peor es llegar al final y ver el intento de sorprender que no sorprende en absoluto y que encima no tiene ni pies ni cabeza. Es que nada en esas últimas 10 páginas tiene sentido.

De verdad que lo siento, pero es que no puedo sacar nada de este libro que haga que me merezca la pena el tiempo invertido en leerlo. Bueno, quizás este es el punto positivo, que he tardado poco por que no es un libro extenso, pero en definitiva si alguien me preguntara a mi, yo no podría recomendarlo.