Una suerte pequeña

Después de muchos años Mary, debe de regresar al lugar al que un día escapo para olvidar su pasado.
Al inicio de la historia conocemos a Mary, quien recientemente acaba de perder a su pareja gracias a un cáncer, ella trabaja como maestra y evaluadora de un estilo de programa educativo en el instituto que antes dirigía su difunta pareja, por razones de la vida tiene que regresar a su país natal para evaluar a un colegio que quiere sumarse a su estilo de estudio, ya que se les necesita evaluar personalmente a los maestros e instalaciones se manda a un encargado y antes de fallecer su pareja este la había convencido de que era tiempo de afrontar los fantasmas de su pasado.
Sola y con muy pocas ganas de regresar al lugar que tanto dolor le trajo realiza el viaje y para aumentar su dolor ira a evaluar la escuela en la que ella trabajo antes de salir huyendo del país.
A medida que ira pasando la historia podremos ver indicios de que fue aquella acción tan terrible que la hizo huir abandonando todo lo que alguna vez quiso y conoció, si bien esto hace que al inicio me cueste empatizar con la protagonista cuando descubres lo que paso y lo que la llevo a tomar la decisión de huir te das cuenta de lo injusta que puede llegar a ser la vida.

Mary es un personaje complejo, lleno de cicatrices y de heridas que aún no cierran y que ha perdido todo lo que ha querido y se queda en medio de este mundo que solo le ha causado daño, si bien al inicio es difícil comprender el porqué de su actitud cuando entiendes por lo que paso y las consecuencias que tuvo no solo para ella sino para toda su familia, además de que terminas detestando a su esposo y su forma de reaccionar, también te muestra la realidad de la sociedad ante estos casos.