Metros por segundo

En pleno campo, en el oeste de Jutlandia hay una comunidad donde se va a trasladar nuestra protagonista con su novio y su bebé.

Él es maestro de la escuela que allí hay, unas escuelas especiales llamadas "escuelas para la vida" en las que lo más importante es el desarrollo y el aprendizaje personal. Durante el curso profesores, personal y sus familias conviven con los alumnos, comen y hacen vida social juntos. Son de distintas procedencias y deben ser mayores de 17 años.

Así nos muestra el día a día, la dificultad de la conciliación familiar, la maternidad, adaptarse a un lugar y unas personas distintas con distintas costumbres que te hacen sentirte todavía más perdida.

Lo que nos cuenta de su día a día es un conjunto de experiencias sobre como adaptarse y como encajar en esta comunidad pero lo que más me ha gustado ha sido el consultorio. Porque ella tiene un consultorio en el periódico local donde da consejos . Bueno, más que aconsejar lo que hace es contar sus propias experiencias y reflexionar sobre los distintos temas sobre todo sobre la maternidad, las relaciones personales y la propia sensación de ser uno mismo. Escribe lo que a ella le apetece, es genial.

Adaptarse o intentar adaptarse y las dificultades que tiene para ello contado con un humor tan especial nos puede servir para reflexionar sobre este tema que a todos nos ha afectado en algún momento de nuestra vida. Porque todos en un momento u otro hemos sido "nuevos" en algún sitio, trabajo o grupo de amigos. Una lectura fresca, que se lee en nada y que ganó el Premio de las Librerías de Dinamarca.


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